La Historia de la Ópera y del Canto guarda tesoros en forma de excelentes voces de hombres y mujeres que hicieron de su arte un vehículo para emocionar a los auditorios de todos los tiempos. De entre todas ellas, y por razones obvias, pocos son los registros sonoros que nos han legado, pues la grabación sonora no es más que un invento reciente en el largo transcurrir de la Historia de la Música.