Música Clásica para la Senda de los Faros
Fecha de publicación: 29 de mayo de 2009
No escapa a ningún alma sensible que los Faros, más allá de su labor utilitaria, de reconocido e imprescindible valor como guía para las embarcaciones que surcan las costas del mundo, y que han mostrado el camino a lo largo de tantos siglos de singladura existencial a nosotros, desvalidos seres humanos, atesoran, también, entre sus paredes, una constelación de momentos vividos en soledad por sus moradores y amigos los torreros.
LA MÚSICA CLÁSICA Y LA GEOGRAFÍA
1. CABO SILLEIRO
¿Cuántas y cuántas páginas podríamos escribir con los pensamientos y anhelos de aquellos inquilinos? ¿Qué emociones guardan ocultas en sus pequeños refugios? ¡Qué excelentes entornos para la meditación y el viaje interior al fondo de nuestros más escondidos, y tal vez olvidados, sentimientos! ¡Qué paz! ¡Cuánta poesía!
¡Pero los tiempos adelantan que es una barbaridad! como hace ya muchos años popularizó D. Hilarión en la Verbena de la Paloma. Por ello, hoy, se le buscan a estas luminarias nuevas funciones. Una de ellas la turística.
Así, entre otras, se ha creado una ruta de senderismo denominada SENDA EUROPEA CORNISA ATLÁNTICA que desde Lisboa, y a través de la costa lusitana, gallega, cantábrica, francesa, del Mar del Norte y el Báltico, llega hasta San Petersburgo. En ella se recala en los faros más importantes de tan extenso litoral.
La Consellería de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia, a través de su Plan de Ordenación del Litoral, proyecta el tramo gallego de esta Senda Europea mediante la realización de un sendero de 1.900 kilómetros que “toca” 37 faros, desde Cabo Silleiro en la provincia de Pontevedra hasta Illa Pancha en Ribadeo, Lugo.
Clasica2 quiere hacerle un humilde homenaje a esos torreros y a esos faros trayendo a estas páginas una pequeña historia del faro, una página poética, y una audición musical que las ilustre. Así, de esta manera, podremos realizar el viaje musical por la Senda de los Faros y sus Misterios. Espero que sea de vuestro interés.
Y dicho esto, pongámonos en la salida de la senda. En Cabo Silleiro.
FARO DE CABO SILLEIRO
FICHA TÉCNICO-HISTÓRICA
(Fuente: Manu Ferreiro- Autoridad Portuaria de Vigo)
"El faro está situado a 42º 06´3 latitud norte y 08º 53´8 longitud oeste, a una altura de 30 metros sobre el terreno y 85 metros por encima del nivel del mar. Da una luz blanca en grupos de 2+1 destellos cada 15 segundos con un alcance de 35 millas náuticas.
El actual faro de Silleiro fue construido en 1924 sustituyendo al faro antiguo que se había inaugurado el 31 de Marzo de 1862 y que daba una luz blanca fija de 17 millas náuticas de alcance. Del antiguo faro aun se conserva la fachada de granito en la primera línea de costa a unos 800 metros al NNO, sobre las restingas que despide el cabo.
El nuevo faro fue construido para responder a la necesidad de conseguir un mayor alcance de luz. Para ello, era preciso elevar de forma considerable la altura del plano focal y colocar un aparato luminoso de mayor potencia, objetivos que era imposible alcanzar con la torre antigua. Fue inaugurado el 8 de Agosto de 1924 y funcionó conjuntamente con el viejo faro durante un mes, siendo atendido por el torrero Juan Prego.
El autor del primer proyecto fue el ingeniero Ramón Martínez Campos, siendo después reformado dicho proyecto por Mauro Serret, quien dirigió finalmente las obras ayudado por el torrero Juan Gutiérrez. Los trabajos fueron adjudicados en 158.254 pesetas.
Cuando el faro llevaba 5 meses funcionando, en la noche del 21 al 22 de Diciembre, tuvo lugar un incendio en la cámara de servicio debido a la caída de un quinqué sobre unos algodones empapados en petróleo, utilizados en la limpieza de los derrames de carga de los depósitos. En aquel momento se encontraban en la cámara dos torreros Ildefonso Ruiz Mayorga y Antonio Bruno, junto con la hija de este último. No fueron capaces de pagar el fuego, el primero pudo huir por la escalera, mientras que los otros dos buscaron refugio en el balcón exterior, sufriendo los tres importantes quemaduras.
A pesar de todo, y una vez apagado el fuego, intentaron poner a funcionar de nuevo el faro con una lámpara de socorro en medio de una fuerte tormenta aquella noche, pero fue imposible y la linterna llegó a perder 18 cristales.
Tuvo que rehabilitarse rápidamente el faro antiguo mientras se reparaba el nuevo y así estuvo funcionando hasta que la noche del 13 de Julio de 1925 comenzó a funcionar el faro actual de forma definitiva.
El 15 de Septiembre de 1932, la electricidad sustituye al petróleo como elemento de iluminación. En un principio el faro funciona con una lámpara de 1500 W que posteriormente se cambió por una de 3000 W.
En el año 1955 se convierte en radiofaro, acoplándose unas lentes que producen una línea aérea de 70º sobre la horizontal, pudiendo ser identificado por los aviones hasta una distancia de 20 Km.
En él se instaló en el año 1926, uno de los primeros radiofaros alimentado por un grupo electrógeno y baterías, sustituido en 1952 por otro más moderno de la casa Estándar modelo LB – 100 y que funcionaba encadenado con el faro de Cabo Vilán y Cabo Finisterre. Con posterioridad este equipo es sustituido por otro Marconi que estuvo funcionando hasta fechas recientes.
En la actualidad, además de seguir prestando servicio como señal luminosa es una base receptora de dos sistemas diferentes de medición del oleaje y las corrientes, y dispone además de una estación emisora – receptora del nuevo sistema AIS de ayudas a la navegación".
PÁGINA POÉTICA
Me encanta este delicado y marinero poema de Manuel Antonio se su obra De Catro a Catro y que bien pudo haber recitado nuestro torrero del Faro de Cabo Silleiro o de cualquier otro faro del mundo. Dice así:
SÓS
Fomos ficando sós
o Mar o barco e mais nós
Roubaron-nos o Sol
O paquebote esmaltado
que cosía con liñas de fume
áxiles cadros sin marco
Roubaron-nos o vento
Aquel veleiro que se evadeu
pol-a corda floxa d’o horizonte
Este oucéano desatracou d’as costas
e os ventos d’a Roseta
ourentaron-se ao esquenzo
As nosas soedades
veñen de tan lonxe
como as horas d’o reloxe
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SÓLOS
Fuimos quedándonos solos
el Mar el barco y nosotros
Nos robaron el Sol
El paquebote esmaltado
que cosía con lineas de humo
ágiles cuadros sin marco
Nos robaron el viento
Aquel velero que se evadió
por la cuerda floja del horizonte
Este océano desatracó de las costas
y los vientos de la Roseta
se orientaron hacia el olvido
Vienen de tan lejos
nuestras soledades
como las horas del reloj
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PÁGINA MUSICAL
Oigamos a continuación un ejemplo de Las Cantigas de Amigo, debida al trovador gallego Martín Codax, la titulada Ondas do mar de Vigo, estructurada en cuatro estrofas de tres versos y que nuestro solitario torrero, esta vez sí el de Cabo Silleiro, pudo entonar preguntándole a las olas de Vigo por su amor.
- /recursos/audio/martincodaxondasvigo.mp3
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Martín Codax: Ondas do mar de Vigo
Ondas do mar de Vigo,
se vistes meu amigo?
E ay Deus, se verrá cedo!
Ondas do mar levado,
se vistes meu amado?
E ay Deus, se verrá cedo
Se vistes meu amigo,
o por que eu sospiro?
E ay Deus, se verrá cedo
Se vistes meu amado,
por que ey gran coydado?
E ay Deus, se verrá cedo!
Dos palabras antes de la audición. El ciclo de las seis canciones que integran este legado musical y poético de Martín Codax, tienen un hilo argumental. En ésta, la amada separada de su amado espera su regreso contemplando la ría de Vigo y canta a las olas su cuita de amor.